Lo sé, lo sé, no se parece demasiado, pero Orlando Bloom tenía que estar entre mis retratos. Quizá dentro de un tiempo lo repita y se le de un aire, pero de momento esto es lo que he podido conseguir.
Mi experiencia con los difuminos nuevos ha sido gratificante, permiten mayor detalle en los lugares pequeños como los ojos o los labios y dan mayor realismo. Es decir, no usaré más las yemas para difuminar XD.
La verdad es que ha sido todo un reto, ya que es la primera vez que dibujo un rostro masculino y me siento muy contenta con el resultado, aunque no me resigno y espero hacerlo mucho mejor.
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No tengáis miedo chicos, porque el miedo paraliza, el miedo te hace sufrir, arrebata oportunidades, sueños, esperanzas... Y aunque es completamente comprensible temer cometer un error, si no arriesgamos, jamás sabremos si hubiésemos conseguido algo mejor, y quizá nos arrepintamos.
Yo no tengo miedo y me quiero arriesgar.
¡Nos vemos pronto!
Un abrazo enorme!
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